Dos buenos mozos de Margé.

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(Gouache sobre cartón de Luis López)

Matías Tejela lidió el pasado mes de julio en Mont de Marsan (Francia) un estupendo astado de Robert Margé al que le cortó las dos orejas. Esta ganadería me llama la atención por la variedad de los pelajes, su presencia y la transmisión del que sale bueno. Motivo el primero por el que me decidí a pintarlos en este gouache sobre cartón.

La historia de su ganadero no es menos curiosa. Aburrido de su trabajo en la banca, compró un lote de vacas de la Camarga que con el tiempo y mucho esfuerzo mejoró con vacas y sementales de Cebada Gago, Cuvillo y Santiago Domecq. Cuenta como anécdota que, con unas pocas cabezas de ganado, se le escapó un ternero que persiguió hasta el agotamiento. Se topó con un coche del que salió un hombre en su ayuda. No era otro que el padre de Sebastián Castella. Aun así, siguió en busca de la res perdida( ¿la encontró? ) hasta dar con una explanada en el camino con la que se quedó maravillado. Años más tarde, ese lugar sería el de su plaza de tientas.

(Pues si, cuenta el ganadero que finalmente halló a su ternero en un rebaño de corderos)