jueves, 13 de enero de 2011

Libro: "Mañana toreo en Linares".

Desde hace unos años, Edicions Bellaterra ha apostado por incluir la literatura taurina en su fondo editorial. Ubicada en Cataluña, tierra políticamente hostil a la Fiesta, ha publicado desde textos de Gregorio Corrochano a geniales ensayos como “Filosofía de las corridas de toros” de Francis Wolff, libro en el que el catedrático francés muestra toda la sapiencia contenida en una tarde de toros. Y hace sólo unos meses el también catedrático François Zumbiehl presentó “Mañana toreo en Linares”, relato de algo más de cien páginas en el que el escritor se mete en la piel de aquel que estaba a punto de calzar aquella taleguilla rosa palo y oro para pasar, con su sacrificio, a la historia de la tauromaquia: Manuel Rodríguez “Manolete”.

Como cada tarde de corrida, “Zumbiehl - Manolete” despierta en el momento en que Guillermo, su mozo de espadas, perturba su duermevela con un escueto “es la hora…”. Es entonces, como ya hiciera Chaves Nogales en su extraordinaria biografía de Belmonte, cuando el califa cordobés reflexiona sobre su vida. Recuerdos entremezclados con la alegría de volver a Linares en la que será su última tarde. El libro aporta y aglutina en primera persona datos que los amantes del impávido torero hemos devorado, pues hay que admitir que la figura de Manolete siempre ha gozado de buena salud literaria. Pero el relato va más allá. Es, en palabras del autor, “un intento por resucitar su voz… de adentrarnos en el misterio de su fragilidad señorial y de remontarnos hasta la fuente de su exigencia mortal”.

Bonito detalle…


El gran pintor Diego Ramos me manda este fresco y ágil “garabato” que esboza una “manoletina”, muy apropiado para esta entrada. ¿Será la génesis de un gran trabajo…?. Sólo tú lo sabes. Quizás acabas de entreabrir la puerta de tu alma para que las musas se asomen. De momento un estupendo apunte para aquellos que disfrutamos con tu obra.

2 comentarios:

Enrique Martín dijo...

Luis:
Como siempre puntual informándonos de cosas muy interesantes y ese "garabato" es una verdadera maravilla. Lo bien que hay que pintar y dibujar para poder hacer algo así, y el talento que hay que tener dentro. Me parece una maravilla.
Un saludo

Tercio de Pinceles dijo...

Querido Enrique,

lo cierto es que no hay como tener algún ratito de tiempo libre, pues disfrutar de la lectura es otra de mis aficiones.

El apunte de Diego es un esbozo estupendo. Me gustó tanto al verlo que pensé que nada podía ilustrar mejor este "post".

Un abrazo,

Luis