viernes, 27 de enero de 2012

El apunte del autor.

Cuando Juan José Padilla fue corneado gravísimamente el pasado mes de octubre, pensé que sería mejor homenajearlo en su vuelta a los ruedos. Y no nos ha hecho esperar demasiado. Ahí está mi último gouache, para aquel que antes del percance que pudo costarle la vida comentó a Miguel Abellán “me falta una cornada de espejo…”. Ese que durante estos meses nos ha hecho creer para ver, ahora nos devuelve la ilusión al ver para creer. Fe y raza.

 Padilla, nos lo has puesto muy difícil pues ¿cómo contarle a los que vengan quién ese que con andares toreros pasea un siniestro parche negro?. Con un nudo en la garganta, difícilmente podré articular palabra para decir de ti “he aquí el hombre”, el Ecce Homo de la arena.

"Resurrection (raise and walk!) - Resurrección (¡levántate y anda!)", gouache sobre papel de Luis López

2 comentarios:

Enrique Martín dijo...

Luis:
Yo ya sé de sobra tu arte y creatividad con los pinceles para reflejar momentos y situaciones, pero lo de pintar sensaciones es muy distinto. Hoy no nos has regalado un momento, ni tan siquiera un retrato. Esto es la imagen de un estado de ánimo. Chaval creo sinceramente que vas camino de ser un maestro.
Enhorabuena y es un placer tenerte tan cerca.

Tercio de Pinceles dijo...

Enrique,

como de costumbre me agradan enormemente tus palabras.

Desde el pasado mes de octubre estaba en deuda con la actualidad y lo que le ocurrió a Juan José merecía una reseña en el blog. No hice oídos sordos, más bien preferí evitar la emotividad del momento y canalizar las emociones que eran muchas e intensas. Viví emotivamente la misma situación cuando Lucio Sandín sufrió un percance parecido. Estuve en su regreso a los ruedos como novillero en Las Ventas... cómo una banderilla traicionera golpeó su nuevo "ojo de cristal" una semana después... verle años más tarde vestirse de grana y oro en el hotel camino de confirmar la alternativa a Juan Rivera...

Puede que en el "apunte" haya canalizado todas esas emociones; o quizás es lo que me creo. Algo de eso si que tiene y más que el resultado me encanta llegar al alma y sentimiento de los amigos como tú, Enrique.

Sólo pido seguir teniendo minutos en el día para pintar con gusto y arte.

Un fuerte abrazo,

Luis